¡NO! ¡TÚ NO! ¡MAMÁaaa….!

Como padre me ha pasado en más de una ocasión, que mi hija ha mostrado predilección por su madre, ante una propuesta mía o ante mi simple presencia, negándose a estar conmigo y eligiendo querer estar con mamá.
En esos momentos se muestra firme, decidida y, a veces, por esa manera de comunicarlo, yo sentía un ”rechazo”, una falta de empatía… Me parecía que tenía poco tacto o poco cuidado o que sus maneras eran poco agradables hacia mí… ¿te ha pasado esto a ti o a tu pareja?
Momentos en los que he querido pasar un rato con mi hija, o ayudarla en algo o acompañarla para lavarse los dientes, o ponerse el pijama… ¡o jugar! E independientemente de la propuesta, su respuesta era: «¡¡¡¡Noooooo, tú no.. MAMAAAA!!!»
En esos momentos, me sentía incómodo, agredido, violentado, RECHAZADO. Aunque a veces no fuera capaz de darme cuenta en el momento, ahora soy capaz de reconocer que todas estas emociones que sentía tienen mucho que ver con mi historia personal.
De pequeño mis padres se separaron y no volví a ver a mi padre nunca más. Detrás de una coraza que había inventado durante años para protegerme, estaba la fragilidad del abandono, del rechazo.
Y con estas acciones mi hija me la volvía a despertar, «¿No me quiere?», «¿no me necesita?» me preguntaba. Nada de eso. Ella estaba eligiendo, era su modo de decirme que estaba necesitando pasar ese momento con su madre.
"En vez de tomarnos la conducta de los niños como algo personal, conviene entender que, cuando tienen una pataleta, no están pensando en nosotros, sino solo en sí mismos"
Shefali Tsabary
Nuestros hijos no rechazan a nadie, ELIGEN. Y cuando son pequeños no tienen los argumentos, las palabras empáticas para comunicar su elección de manera que tengan en cuenta a todas las personas. Solo manifiestan su intención, su decisión, su apetencia o a su necesidad y lo hacen de todo corazón, con todo su ser, con toda su energía.
Cuando fui trabajando en ello y entendiendo que cuando no quiere estar conmigo, no es que me rechace, sino que está eligiendo hacer otra cosas o pasar el tiempo con otra persona, mi percepción de esas situaciones cambió. Entonces pude darme perfectamente cuenta que se trata de sus necesidades, de su necesidad de maternaje, de su deseo de pasar más tiempo con mamá o que sea mamá la que en ese momento haga o la ayude con algo.
Y esto, cambia mucho la situación. Para empezar, puedo acompañar ese momento desde otro estado anímico, desde otras emociones. Al ser consciente de la necesidad y que mi hija está eligiendo (no rechazando), puedo satisfacer esa necesidad, favorecer el entorno y tomar decisiones para que todas las partes podamos sentirnos mejor con nuestras necesidades satisfechas.
Lo importante es descubrir por qué nos molesta ese aparente rechazo, tomar consciencia de ello para poder cambiarlo.
¿Y si en ese momento no puede ser?
Primero analicemos sinceramente qué quieren decir de verdad las palabras ‘no puede ser’. A veces, ocurre que nosotros también hemos elegido y no vemos otras opciones. En ocasiones, por imponer nuestro criterio, en ocasiones por organización preestablecida o por el motivo que sea.
Veamos también en qué manera interfiere su decisión con nuestras creencias y miedos. Me explico; lo que quiero decir es: tomamos una decisión, por ejemplo papá acuesta a la hija mientras mamá hace otra acción. Entonces la niña dice «que no, que mamá” y lo dice enérgicamente, enfadada…
¿Qué ocurre? Saltan nuestras alarmas, «¡Está consentida! ¿¡por qué tiene que tomar ella las decisiones!?» y entonces por miedo a que se salga con la suya, seguimos adelante con nuestra elección. Aun cuando no tengamos ningún motivo más para no satisfacer su necesidad.
¿Pero qué hay de sus necesidades? Aquí podríamos hablar también de las nuestras, por supuesto, pero…
¿Quién ha elegido como organizarse?
¿Podría hacerse de otro modo?
¿O es lo mismo que estamos viendo en nuestros hijos? Tomamos una decisión y hasta el final.
Ellos están también eligiendo, y quieren o necesitan a mamá (o a papá vaya) en ese momento..
¿Que podemos hacer?
Podemos replantearnos la cuestiones anteriores. Analicemos la situación,
¿Podemos atender a su necesidad y petición desesperada o realmente no podemos ahora?

Si no es posible ahora, siempre podemos verbalizar, acompañar, entender, nombrar, explicar la situación… pero sin juicio, teniendo en cuenta la necesidad de nuestra hija, sabiendo que no me está rechazando sino eligiendo
En esos momentos, pongamos el foco en EL MENSAJE que están recibiendo por nuestra parte. Con nuestra reacción podemos estar reprimiendo y juzgando su deseo, petición, necesidad.
Necesitamos cambiar esas reacciones para dar otro mensaje y así, dar herramientas para que puedan expresar lo que necesitan y lo que desean. Y para ello necesitan que nombremos nosotros lo que está ocurriendo y lo que está sintiendo nuestra hija.
Por ejemplo, “te entiendo, ahora lo que quieres es estar con mamá o que venga ella a jugar o a acompañarte a la dormir…”
Esto lo cambia todo. Quizá siga enfadada, quizá siga queriendo que venga mamá. No se lo neguemos, no le hagamos sentir mal por ello, es perfectamente normal.
Lo más importante que podemos hacer en ese momento es darle la herramienta de la empatía que es lo que requiere esa situación.

Recuerda que buscamos un aprendizaje a medio y largo plazo, no que hagan lo que queremos y deseamos ahora. Si les respetamos, si mostramos empatía con sus emociones y elecciones, si les entendemos y acompañamos, entonces podrán adquirir también esos valores y esas herramientas.
Poco a poco. Aún cuando nos parezca que nuestras hijas o hijos ya saben comunicarse bien, siguen siendo inmaduros para gestionar todas las situaciones de su día a día del modo en que nos gustaría.
Mirémonos a nosotros para ver que todo esto no tienen que ver con la edad, si no ¿por qué seguimos actuando nosotros de este modo también?
Los niños están más conectados a sus necesidades de lo que pensamos y pasamos todo el día interviniendo y forzando situaciones con las que hacemos que o bien se desconecten de ellas o bien tengan que manifestarlas enérgicamente a través de llantos, gritos o exigencias…
Si quieres subscribirte a nuestra lista de correo y estar al tanto de nuevas entrevistas, artículos, vídeos, puedes hacerlo aquí y recibirás de regalo el minicurso gratuito “Transforma tus Reacciones Automáticas”
Jose Ramón Fernández
Considera el acompañamiento emocional el eje básico en cualquier proceso de aprendizaje.
Actualmente, es acompañante de un proyecto de educación libre en la naturaleza.
Latest posts by Jose Ramón Fernández (see all)
- NIÑOS Y EMOCIONES – Cómo ACOMPAÑAR los momentos de gran INTENSIDAD EMOCIONAL - mayo 7, 2019
- ¿Cómo afecta a los niños no poder tomar decisiones? - abril 24, 2019
- ¿Pueden los niños y niñas tomar decisiones? - abril 8, 2019
Que bonito!!! Estamos en un momento similar con nuestra hija de 2 años y papá a veces se pone a su nivel!!! Gracias gracias gracias ahora mismo se lo reenvío !
Espero sinceramente que os ayude y papa entienda lo que supone para vuestra hija tener esa capacidad de elegir, que sea respetada en ello y comprendida. Eso le ayudará a seguir eligiendo y tomando acción en su vida y sabiendo de la comprensión y apoyo de sus padres.
Aveces, se hace dificil porque entran en juego nuestros egos y nuestras creencias, así como los comentarios que hemos oido tantas y tantas veces, y tan negativos.. como tiene mamitis, o esta consentida.. es importante hacer oidos sordos y confiar en vuestro institnto y en vuestra hija.
Un saludo
Gracias por el artículo. Hasta ahora a nosotros nos ha pasado así. Todo era mamá y mi marido lo ha llevado muy bien. Ahora me toca a mí. Mi hija está empezando a volcarse más en su papá. Me sirve de gran ayuda pensar que no es rechazo a mí, sino que ahora le elige a él.
Si, lo que comentas ocurre en muchas ocasiones también, saber que no es rechazo y que siempre están eligiendo nos ayuda a llevarlo de otro modo. Sería genial que nuestras hijas/os, pudiesen ser super empáticos y decirnos algo así como «mamá, ahora me apetece estar con papá jugando y cuando terminemos tendré un ratito contigo… » ¿verdad?
Yo soy mamá soltera y trabajo mucho pero le dedicó todo el tiempo de calidad a mi hijo que puedo, salimos jugamos y soy muy cariñosa pero luego sólo quiere estar sólo con su abuela y eso me duele mucho porque siempre me esfuerzo porque se sienta amado y la verdad si empiezo a sentir rechazo hacia el y eso me duele y me da miedo, quiero entender pero me gana el sentimiento. Ayuda
Hola, Rosaerika, entiendo que tu hijo cuando no está contigo porque estás trabajando, es la abuela quien le cuida. Es normal y fabuloso que pueda tener ese apego y amor por la persona que está también con él. Tienes que quitar de tu cabeza la palabra rechazo, los niños no rechazan, están eligiendo. Quizá aún asi, siga ese dolor, porque elige a otra persona, pero como te digo es maravilloso que en tu situación ame y desee estar con la persona que le cuida.
Ahora bien, que puedes hacer? concectar, conectar y conectar, crear y priorizar siempre el vinculo con tu hijo, respetar siempre su decisión, no te pongas en su contra, acompañale en ese amor hacia su abuela también, (no es tu enemiga, es tu alida, siempre recuerdatelo, no es una competidora por el amor de tu hijo)
¿Tienes alguna opción de buscar la manera de pasar más tiempo con tu hijo? no? inventala, quizá no ahora, quizá es una decisión que tiene su tiempo, quizá no estas en disposición de hacerlo ahora, no lo sé…
Si te parece bien, puedes exponer tu caso en el grupo de facebook de desaprendiendo para aprender-comunidad online, de seguro muchas madres y padres pueden desde ahi darte más claves, compartir sus experiencias y hacer tribu (aunque sea por apoyo).
Te recuerdo que tenemos un curso que podría venirte genial para favorecer ese vinculo, lo tienes en la pagina web con toda la info, es VINCULOESENCIAL. Te dejo el enlace (vinculoesencial.com) . Estáte atenta al correo (si eres suscribtora nuestra) (si no hazte ya) porque esta proxima semana vamos a lanzar un seminario sobre rabientas y conflictos y a las personas que estén en él vamos a ofrecer una promoción muy interesante para el curso con algunos complementos.
Tienes también la posibilidad, de concertar una sesión individual para profundizar y trabajar más en este tema, si lo necesitas. EStaremos encantados de ayudarte, en la página tienes también información para ello.
Un saludo
Me sentí identificado desde la primera oración.
Gracias!
Muchas gracias a ti Anthony! Nos alegramos de que haya resonado contigo…es una situación que se da mucho pero pocas veces se le pone palabras:)